Como volverse Eco eficiente y no morirse en el intento…..

Esta semana he querido ser ecológicamente responsable y he ido al trabajo (y vuelto evidentemente) al trabajo en bicicleta de montaña

Los datos que dimensionaban mis dudas iniciales eran:

1. Que vivo en la sierra de Madrid.
2. Que trabajo en Getafe.
3. Que debo fichar antes de las 8:30, después de ducharme.
4. Que no quería morir y para ello debía usar luces por todos lados.
5. Y que mi velocidad media estimada en bici de montaña y de noche era de 25 kilómetros/hora.

Después de analizar estos datos de partida decidí ir en coche hasta las Rozas y desde allí coger la bici de montaña y comenzar a recorrer los 40 kilómetros que me separaban hasta mi destino.

Comencé a pedalear a las 6:20 de la mañana y la ruta elegida fue: El Europolis, Las Rozas, Majadahonda, Pozuelo de Alarcón, Campamento de San Pedro, Aluche, Carabanchel, Orcasitas, Villaverde y Getafe

La verdad que a esas horas, no os podéis imaginar que oscuro esta todo y claro cualquier curva o luz, te “acojona” un poco más de lo que en circunstancias normales debería hacerlo.

Tengo una luz muy potente que me compré en mi época Alemana. Y la verdad que no tuve grandes dificultades para seguir el camino e indicar a los conductores mi posición en todo momento. 

En los primeros 30 kilómetros pude usar un carril bici, en muy malas condiciones, pero que me permitía alejarme lo máximo posible de los coches. El carril bici salía justo desde el lugar elegido para comenzar a pedalear, los AMC de Las Rozas.

Durante estos 30 kilómetros solo tuve que preocuparme de no perderme y seguir la ruta gravada en el navegador, los siguientes 10 fueron otra historia.

En los 10 últimos kilómetros, ocurrieron dos cosas, que entré en Campamento de San Pedro, después de pasar Pozuelo de Alarcon, y que comenzó a amanecer. El dato de que comenzara a amanecer fue positivo, pero lo de entrar en Campamento de San Pedro no tanto. El carril bici desaprecia y la proximidad de los coches, junto a la inexistencia de arcén, me hacia acercarme peligrosamente a los coches. La suerte es que era todo bajada y no me tenía que dedicar a pedalear, solo a centrarme en mi entorno motorizado.

Una vez llegado a Getafe, solo tuve que callejear un poco y llegar a mi trabajo, lo que hice sobre las 8:00, con lo que después de una reparadora ducha pude fichar a las 8:20 de la mañana, con 10 minutos sobre el mejor horario estimado por la organización.

1 hora y 40 minutos para 40 kilómetros entre las tinieblas

Por la tarde me tocaba volver a mi casa, bueno más concretamente a mi coche. Y comencé mi andadura a las 5:30 pasadas. Me tocaba hacer el mismo camino que había hecho por la mañana pero en sentido contrario. Y esta vez el miedo era que me alcanzara la noche. Había calculado, con algo de margen, que me diera tiempo a llegar al coche todavía de día.

El mismo problema que tuve por la mañana entre Campamento de San Pedro y Villaverde se me repitió por la tarde, pero con más coches, semáforos y cuestas. Tarde mucho en recorrer los 10 kilómetros iniciales, pero una vez superado este tramo volví a coger el carril bici y disfrute de una agradable vuelta al coche.

Otros 40 kilómetros en 1 hora y 40 minutos de subida.

Como resumen, puedo decir que no es un trayecto muy recomendable, con lo que intentare buscar algún camino alternativo por pistas o caminos de tierra.

Pero lo importante es no desesperar y buscar siempre ser más Eco eficiente, y si con ello podemos entrenar más, pues mucho mejor.

Un saludo fuerte y nos vemos en la próxima ruta al trabajo!!!